DICEN PUNTO COM
Distrito Nacional.- Los jueces del Segundo Tribunal Colegiados condenaron a 30 años de prisión, a un hombre que fue encontrado culpable de matar a un prestamista, en un hecho ocurrido en el sector del Capotillo el día 14 de Enero del 2014.
El Tribunal compuesto por los jueces Sarah Altagracia Veras Almanzar, Felipe Molina y Gissel Soto, acogieron a unanimidad, las pruebas del Ministerio Publico, representado por los fiscales adjunto Eduardo Velásquez Muñoz y María Cristina Benítez, con las que destruyeron la presunción de inocencia del imputado Brayan Antonio Puello.
Según el expediente acusatorio el hecho se produjo en el momento en que la víctima Guio Antonio Pimentel Lara, conocido como el prestamista se encontraba en al calle 6 Norte esq. Diego Velásquez, del sector Capotillo lavando una motocicleta marca Yamaha. Este se encontraba en compañía de su hermano Paul Pimentel Lara, quienes habían terminado de cobrar una suma de dinero, de su negocio de préstamo.
Luego de que la víctima Guido Antonio Pimentel (a) El Prestamista, abordo su motor tomando el bulto del dinero, recorrió la calle 6 Norte, donde fue interceptado por el imputado Brayan Antono9 Puello, quien testea en compañía de un tal Ronny. El condenado Antonio Puello, toma un arma y amenazaba a la víctima mientras el tal Rony intentaba arrebatarle el bulto que contenía el dinero. Pimentel Lara logra zafarse e intenta escapar, por lo que el imputado Brayann Antonio Puello, le hace varios disparo, provocándole heridas en región dorsal derecha y dorso lumbar derecho, heridas que le provocaron la muerte.
Este hecho fue presenciado por el nombrado Álvaro Javier Amparo Rojas, quien se encontraba en los alrededores y un menor. Este socorrieron a la victo Pimentel Lara (a) El prestamista y lo montaron en una guagua de la ruta 29 llevándolo al Hospital Moscoso Puello, donde falleció mientras recibia atenciones medicas, por este hecho se encuentra prófugo el tal Ronny.
El Ministerio Publico acuso al imputado Brayan Antonio, de violar los artículos
265, 266, 295, 304, 379 y 386-2 del Código Penal Dominicano y los artículos 2,3 y 39 párrafo III de la ley 36.
