Decenas de personas murieron en un accidente de avión en Nepal.
El vuelo de la Yeti Airlines, que iba desde Katmandú, la capital de Nepal, hasta la turística ciudad de Pokhara, se estrelló al aterrizar y luego se incendió.
Los videos publicados en las redes sociales muestran el avión volando a baja altura sobre un área poblada antes de girar bruscamente.
Aún no hay certeza sobre el número de personas fallecidas, ya que los informes al respecto varían. Un funcionario calculó las muertes en 62, mientras que otro dijo que hasta ahora se habían recuperado al menos 29 cuerpos.
Tampoco hay reportes claros sobre la existencia de sobrevivientes.
El vuelo partió con 68 pasajeros a bordo, incluidos al menos 15 ciudadanos extranjeros y cuatro miembros de la tripulación. Entre los extranjeros hay uno de nacionalidad argentina.
Deeveta Kal, residente local, le dijo a la BBC cómo corrió al lugar del accidente después de ver el avión caer del cielo poco después de las 11:00 a. m. hora local.
«Para cuando llegué allí, el lugar del accidente ya estaba abarrotado. Había una gran columna de humo saliendo de las llamas del avión. Los helicópteros llegaron al poco rato», dijo.
Por el lugar en el que quedó el avión, Deevata Kal argumentó que «el piloto hizo todo lo posible para no caer en ninguna zona habitada».
«Había un pequeño espacio justo al lado del río Seti y el avión cayó en ese pequeño espacio», añadió.
Cientos de soldados nepalíes participan en la operación en el lugar del accidente en el desfiladero del río Seti, a solo un kilómetro y medio del aeropuerto.