SANTO DOMINGO.-Tras conocerse la investigación de la Procuraduría Especializa de Persecución Contra la Corrupción Administrativa (PEPCA) sobre él y la suspensión de que ha sido objeto, el juez Juan Rodríguez Consoró dijo sentirse acosado por las “innumerables injurias y calumnias” expresadas por el ministerio Público sobre su persona.
Manifestó que esas acusaciones guardan “un oscuro propósito” por lo cual ha decidido salir a defender su honor y la posición de los jueces independientes de los jueces dominicanos, y aseveró que “el honor es solo patrimonio del alma y el alma solo le pertenece a Dios”.
Ayer, el director de la PEPCA, Wilson Camacho, reveló que el juez Rodríguez Consoró está siendo investigado por presuntas faltas graves en el ejercicio de sus funciones.
De su lado, Rodríguez Consoró dijo que no se opone a ser investigado, inclusive cuestionado, pues es un servidor público “y los jueces recibimos nuestros salarios de los impuestos del pueblo”.
A través de una carta pública, el magistrado Rodríguez Consoró dijo que la sociedad tiene derecho a saber quien administra la justicia y si el servidor es digno de tal función.
“Estoy vil e injustificadamente atacado por el Ministerio Público, el cual es una parte interesada en el proceso penal y los jueces que somos los terceros imparciales estamos en la obligación legal y constitucional de refrenar sus actuaciones arbitrarias, abusivas y atropellantes en contra de todo ciudadano”, expresó el juez.
Asimismo, señaló que el Ministerio Público “ante sus ya conocidas ineficiencias e inoperancia investigativas”, persigue y desea bajo la intimidación y el denostamiento moral en los medios de comunicación con el objetivo de secuestrar el poder de decisión e independencia de los jueces.
“No veo ese ataque como algo perjudicial, únicamente a mi persona, sino como un ataque feroz a nuestra Constitución y a los cimientos de nuestra Carta Magna, ya que es el propio sistema democrático de la nación que está siendo gravemente golpeado; es la estabilidad democrática y jurídica del país, que está siendo lesionada a muerte”, sostuvo.
Dijo que durante su ejercicio como juez, ha actuado rectamente, apegado a la Constitución, la ley, la ética, y la moral, “no tengo nada que temer ni nada que esconder, todo lo contrario”.