Distrito Nacional.- El Ministerio Público señaló que el accionar de Fausto Miguel de Jesús Cruz (Carandai), imputado del asesinato de Orlando Jorge Mera, mostró una acción criminal que evidencia una conducta típica de “un asesino frío y calculador”.
El MP en el expediente Miguel alias Carandai, explica que el imputado, se presentó alrededor de las 10:50 de la mañana, y de manera violenta, a la oficina del director Nacional de Medio Ambiente, Juan Manuel Cuervo Desangles.
En el antedespacho de Cuervo Desangles golpeó en la frente a Alfonso María Mendoza Rincón, asistente del ministro, mientras reclamaba: “Hice campaña y no me resuelven”, al tiempo que le anunciaba que subiría al despacho del ministro.
En ese contexto, Cuervo Desangles alertó sobre la actitud de Cruz de la Mota a Carmen Maribel Peralta Cuevas, coordinadora del despacho del ministro, quien de forma disimulada buscó al sargento mayor de la Policía Nicolás Montero, a quien el imputado también encaró en forma violenta.
Cruz de la Mota pasó enseguida al despacho de Jorge Mera, quien concluía una reunión con varios colaboradores e intentó cerrar la puerta. En ese momento, el funcionario le pidió esperar, se paró en la puerta de su despacho y manifestó al agente Nicolás Montero y a dos empleadas: “Miguel es mi amigo, Miguel es mi hermano, es mi hermano, ¿para qué seguridad?”.
Tras terminar la reunión interna, Jorge Mera procedió a dar paso a Cruz de la Mota y cerró la puerta del despacho alrededor de las 12:00 del mediodía.
Muy pocos minutos después, Cruz de la Mota, sin mediar discusión, “ejecutó su plan de asesinar al Ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la República Dominicana”.
La medida, presentada por el Ministerio Público a través del fiscal titular interino Kelvyn Colón Rodríguez y la fiscalizadora Carolin Junesca de Oleo Santana, indica que el imputado asestó seis disparos a la víctima, incluyendo heridas a distancia y de contacto, “lo que evidencia que no se conformó con dispararle a distancia, sino que luego le hace disparos de contacto al cuerpo mortalmente herido”.
Señala que el accionar muestra una acción criminal que evidencia una conducta típica de “un asesino frío y calculador”.
Enfatiza que se trató de un crimen planificado, que las evidencias muestran que se encontraba en un estado de inconformidad por la negación de un permiso para la empresa Aurum Gavia, S.A., la cual se encuentra bajo investigación, y que había solicitado para exportar 5,000 toneladas de baterías usadas.
“Las evidencias muestran que el imputado había estado tratando de que se le otorgaran múltiples permisos, pero se quejaba de forma airada de que no le resolvían nada e incluso esta situación provocó que hace menos de un mes amenazara al consultor jurídico del ministerio, Edilio Segundo Florián Santana”, dice la medida.