El vocero de la Policía Nacional Diego Pesqueira, puntualizó que los dos hombres que perdieron la vida tras el ataque en San Isidro, recibieron más de 35 balazos.
Los asesinados son Fernando Santos Martínez y Victor Brahiar Sánchez Solano. Mientras que el herido es Julio César Marte Rodríguez.
Los que fueron acribillados iban a bordo de una yipeta CRV 2020 con placa de exhibición y el vehículo recibió más de 35 balazos en un corto tiempo.
La Policía informó que los fallecidos son civiles y que no pertenecen a la institución del orden.
Las autoridades continúan por el momento con las investigaciones del suceso.
Más detalles del ataque en San Isidro
De acuerdo con un testigo de lo ocurrido, la yipeta se desplazaba por la calle a una velocidad lenta, y de repente dos hombres encapuchados e irreconocibles en una motocicleta y le cayeron a tiros contra el vehículo, «y se le descargó un cargador y luego pusieron otro».
El señor dice que lo sucedido es algo inusual, que poco se ve y que se quedó en ‘shock’.
Un morador de la zona dijo en lo referente al caso: “Nos quedamos sorprendidos, y de repente los tipos arrancaron desde que terminaron de tirar, se fueron, yo ni miré para donde se fueron. De verdad que fue algo muy sorprendente y fue algo inusual”, dijo.
«Mucho dolor»
El padre de Fernando Santos Martinez, uno de los dos hombres que fueron ACRIB1LL4D0S dentro de una yipeta en San Isidro, habló con la prensa en medio de mucho dolor y tristeza.
El señor responde al nombre de Fernando Santos, el mismo nombre que tiene su hijo, dijo que su hijo no vivía con él, pero que siempre le pedía que lo dejara ir a su casa, para saber donde vivía y su hijo siempre lo allantaba diciendo que lo iba a buscar todos los domingos para llevarlo a su casa, pero que nunca le enseñaba la casa donde vivía.
Cuando le preguntaron a que se dedicaba su hijo, dijo que supuestamente tenía un Diler de autos que se lo puso un allegado a él.
Cuando le preguntaron que si su hijo tenía problemas, dice que no sabía que trabajaba, pero que lo metieron al medio. En un determinado momento de la conversación, alguien se le acercó como para que no siguiera hablando, pero él dijo que quería continuar hablando.