Una de las versiones fue ofrecida por el abogado Jhovanny Reyes Otaño, quien declaró que se no se trató de un suicidio, sino que a Abel García Reyes “lo asesinaron y luego intentaron aparentar que el mismo se había quitado la vida”.
Según el abogado, mediante fotografías tomadas en la vivienda donde ocurrió el hecho, se deja ver el momento en que mataron, en una de las habitaciones, al joven.
De igual manera, establece que la coartada de quienes supuestamente le quitaron la vida al joven, fue llevaron a la marquesina, pero “olvidaron borrar las evidencias que apuntan a un hipotético asesinato.
En ese sentido, el abogado, quien es tío de la víctima, dijo que se observa sangre en una de las habitaciones, en el pasillo de la vivienda, y otras evidencias que sustentan su tesis de que se trató de un crimen y no un suicidio.
Al lugar de la tragedia se presentó el padre del joven, Héctor García Féliz, quien se observó lastimado por la pérdida, así como por la forma en que perdió la vida su hijo.
Asimismo, se presentaron miembros del Ministerio Público, de la Subdirección de Investigaciones Criminales (Dicrim) y de la policía, quienes procedieron, conjuntamente con el médico legista al levantamiento del cadáver, disponiendo posteriormente su traslado al Inacif, con sede en Azua, para fines de autopsia.