En un decreto colgado en su cuenta de Twitter, la Prefectura indicó que toma nota de la decisión del Tribunal Administrativo de París que el día 13 consideró “inapropiada” la medida que inicialmente había impuesto la mascarilla de forma indiscriminada en cualquier lugar al aire libre porque eso atentaba contra la libertad individual.
En su nueva versión, el decreto señala que la situación epidémica, con una tasa de incidencia “extremadamente alta y una presión muy fuerte en los hospitales, necesita medidas para que los espacios exteriores, aunque los riesgos sean limitados, no sean lugares de contaminación”.
Ahora hay que llevar mascarillas en los mercados, ventas y exposiciones en la calle; en cualquier reunión o manifestación con 10 ó más personas; en las paradas de autobuses y tranvías o en sus alrededores y en los alrededores de escuelas o universidades a las horas de entrada y de salida.