La Conferencia de Obispos Católicos ha pedido este miércoles la “violencia” en el país y ha reclamado la liberación de los detenidos en las protestas del pasado 11 de julio, así como ha abogado por “un proyecto de nación que involucre y motive a todos”.
Tras haber constatado “en las últimas semanas” el “aumento de un clima de tensión y confrontación” que “no es saludable ni beneficia a nadie”, los obispos han emitido un comunicado en el que ha enfatizado en la necesidad de un “diálogo armónico” en el país.
Así, han demandado que los cubanos puedan “expresarse y compartir libremente” sus “opiniones, pensamiento o convicciones, “incluso cuando disienta de la mayoría”, al tiempo que ha condenado cualquier acto de violencia.
“(La violencia) hiere gravemente el alma de la nación cubana y contribuye todavía más al pesar, al sufrimiento y a la tristeza de nuestras familias”, han lamentado los obispos en un comunicado difundido por la Iglesia cubana.
Asimismo, han urgido a la “implicación de los cubanos” en un “proyecto de nación que involucre y motive a todos, que tenga en cuenta las diferencias, sin exclusiones ni marginaciones”.
“Pensamos que hace falta implementar mecanismos donde, sin temor a intimidación y represalias, toda persona pueda ser escuchada y se encaucen las insatisfacciones ante las duras realidades cotidianas que agobian a tantos, especialmente a los más empobrecidos y vulnerables”, han subrayado en la misma línea.
Además, han reclamado “un gesto de indulgencia” para las personas que aún permanecen detenidas por los acontecimientos del pasado verano, en referencia a la jornada de protestas del 11 de julio en decenas de puntos de la isla en las que se produjeron varias detenciones y se denunció represión.
Para los obispos, la liberación de los presos “disminuiría la tensión social” y supondría los agradecimientos de las familias cubanas y la Iglesia.
De este modo, han aseverado que es “imprescindible” llevar a cabo estos “necesarios” y “largamente deseados” cambios para que “favorezcan una vida digna y feliz” en el país.
“Una vez más exhortamos a todos a que no escatimemos esfuerzos para que se allanen los caminos del entendimiento, la reconciliación y la paz, de tal modo que las diversas propuestas sobre el destino presente y futuro de nuestro país, encuentren un ámbito de cordura, tolerancia y concordia, y se establezca un diálogo armónico y civilizado en el cual se puedan encontrar las mejores soluciones a los problemas que nos atañen”, han demandado.
Una nueva jornada de manifestaciones, que las autoridades intentan evitar, ha sido convocada para el próximo lunes, 15 de noviembre. Estas marchas buscan mostrar el descontento del pueblo cubano y continuar con la línea de las históricas movilizaciones del 11 de julio.