Pedernales. – El Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront) aclaró este viernes que la Policía del Ayuntamiento de Haití, no está permitiendo el paso de sus nacionales al territorio dominicano, incluyendo al mercado binacional.
Esto así, por un impasse entre las autoridades de ambos países, que se encargan de administrar los mercados de sus respectivas naciones.
El Cesfront mantiene la presencia de seguridad en la línea fronteriza, con la misma cantidad de soldados que está en los días que funciona la actividad comercial.
Asimismo, manifestó que la multitud que se ve en vídeos publicados en redes sociales, fue ocasionada por el impedimento de la policía municipal del vecino país.
La misma no permite que sus nacionales ingresen a territorio dominicano a abastecerse de productos. Dijo que el objetivo es que los haitianos consuman los alimentos que comercializan en ese país.
Este viernes los legisladores dominicanos sometieron una resolución de apoyo al Poder Ejecutivo, acerca de las medidas tomadas para enfrentar la crisis de Haití.
Los representantes en la Cámara de Diputados y Senadores, proponen una cumbre y piden a la población mantener prudencia en el tema haitiano.
El bloque de diputados del PRSC recolecta firmas para que, el Congreso Nacional pronuncie su total respaldo a las nuevas medidas del Gobierno. El legislador se refiere a los pasos que da el gobierno en busca de enfrentar los posibles efecto sobre el país de la crisis haitiana.
Por su parte, los representantes de la zona fronteriza reiteran allí la situación sigue siendo caótica.
Mientras el gobierno dominicano aplica medidas migratorias y busca consenso entre el liderazgo político, económico y social.
A través de las redes sociales, la población parece mostrarse enardecida, por lo que los legisladores llaman a la prudencia y la calma.
Reiteraron el llamado a la comunidad internacional a tomar más participación en la búsqueda de una salida a la crisis del vecino país.
Así mismo, respaldaron el endurecimiento de las medidas migratorias por parte del Gobierno dominicano. Esto, para enfrentar posibles efectos que sobre la nación pueda tener la crisis de violencia desatada en Haití.