Dinamarca ha regresado este viernes a la normalidad después de que hoy fueran eliminadas las últimas restricciones impuestas por la pandemia de coronavirus, siguiendo el anuncio realizado a finales de agosto por el Gobierno.
La desaparición de las restricciones estaba prevista para el 1 de octubre, pero se adelantó tres semanas debido a que las autoridades consideran controlada la epidemia y por el alto nivel de población vacunada, más del 73 %.
Dinamarca ya había eliminado las mascarillas en interiores en junio y, desde el 1 de septiembre, se habían levantado las limitaciones de aforo para grandes eventos y reabierto las discotecas, aunque todavía era necesario presentar un “pasaporte covid” para acceder a algunos lugares.
Esa exigencia ha desaparecido hoy, día en el que expira la categorización del coronavirus como una enfermedad crítica para la sociedad, que había hecho posible introducir muchas restricciones y cuya eliminación reclamaban la mayoría de partidos.
Uno de los países con más vacunados y menos muertos
Dinamarca presenta unas de las cifras de vacunación más altas en el mundo: el 75,7 % de la población total ha iniciado el proceso (más del 86 % de los mayores de 12 años) y el 73,1 %, lo ha completado, según los últimos datos oficiales.
La tasa de nuevos casos por 100.000 habitantes los últimos 14 días es de 192,35, de acuerdo con el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), mientras la ocupación hospitalaria se mantiene a niveles moderados.
Algo más de 2.600 personas han muerto por covid-19, con una tasa de mortalidad de 44,70 por 100.000 habitantes, según el recuento de la universidad estadounidense Johns Hospkins, la cuarta parte que España y una de las cifras más bajas de Europa.