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Mientras países anuncian ayudas humanitarias sigue el rescate bajo los escombros y se espera impacto de Grace
Las autoridades haitianas elevaron ayer domingo a 1.297 la cifra de muertos a causa del terremoto de magnitud 7,2 que asoló el sábado el suroeste del país.
Protección Civil informó que 1.054 personas murieron en el departamento del Sur, otras 122 en Nippes y 119 en Grand Anse, todas ellas provincias de la península suroeste, mientras que otras 2 personas murieron en el noroeste del país.
Daños materiales
El terremoto de magnitud 7,2 y que ya forma parte de los diez sismos más letales de los últimos 25 años en Latinoamérica, ha provocado cuantiosos daños materiales sobre todo en el suroeste del país, que en enero de 2010 fue asolado por otro terremoto que dejó unos 300.000 muertos y 1,5 millones de damnificados.
Las autoridades incrementaron a 5.700 los heridos a causa del terremoto, que destruyó 13.694 casas y causó daños a otras 13.585, así como a numerosos hospitales, escuelas y otras edificaciones, según cifras facilitadas por el ministro de Comunicación, Jean Emmanuel Jacquet.
Los datos también informan de importantes daños a puentes y carreteras en las zonas afectadas.
Primer ministro llama a la unidad en periodo difícil
El terremoto se produce en medio de un contexto difícil para Haití, que atraviesa desde 2018 por una delicada crisis política y económica, agravada por el asesinato el 7 de julio del presidente Jovenel Moise, a cargo, según las pesquisas, de un comando de 26 mercenarios que irrumpieron en su residencia en Puerto Príncipe.
