SANTO DOMINGO.- Sigfrido Pared Pérez, exministro de Defensa y extitular de la Dirección Nacional de Investigaciones (DNI), dijo este viernes que altos delincuentes y mafiosos se hacen pasar por generosos empresarios, ganaderos e inversionistas para poder burlar a los servicios de inteligencia oficial y llegarle a presidentes y candidatos presidenciales.
Añadió que los servicios de seguridad son efectivos e impiden en gran manera que delincuentes penetren a las figuras políticas, pero que una astuta minoría logra infiltrarse en los partidos y aparece con los candidatos, desatándose el escándalo cuando esas actividades son descubiertas.
En declaraciones a N Digital, Pared Pérez refirió que la situación con los narcos se presenta, principalmente, en pueblos y provincias, pues en esos lugares los “empresarios” y “patrones” tienen el respeto de sus respectivas comunidades, debido a que son percibidos como exitosos.
“Algunos de esos personajes se disfrazan de empresarios y naturalmente, a un ente con imagen empresarial; debes tener un elemento muy contundente en su contra, para poder evitar que se acerque a un candidato presidencial. Siempre van a existir uno que otros que logren infiltrarlos”, agregó.
Pared Pérez, almirante retirado, vertió sus declaraciones a propósito de casos de caso relacionados con figuras políticas. Por ejemplo, el diputado oficialista Miguel Gutiérrez Díaz está apresado en Estados Unidos, acusado de crimen organizado y narcotráfico internacional.
Apuntó que cuando identifican y detectan a un individuo de mala catadura, se despacha una alerta de seguridad para así evitar que se acerque al candidato y proteger a este.
Expresó que una agencia de inteligencia yerra en un caso, es porque ya ha evitado que ocurran cientos de casos de corrupción, narcotráfico, lavado de activos y evasión de impuestos.
“Cuando se identifican a un elemento dudoso, se emite una alerta al equipo de seguridad para evitar que se acerque a la figura. Por eso es tú ves que muchos candidatos se incomodan con la seguridad, cuando le impiden acercarse a una multitud. Eso es porque ya hay una alerta de que hay un delincuente que no se puede dejar acercar”, puntualizó.
El exfuncionario detalló que el problema se da por el tipo de política abierta que se produce en el país, con mucho calor humano, abrazos y contacto personal. Esto es un obstáculo para la inteligencia desenmascarar a los delincuentes encubiertos y disfrazados, pues, además, los delincuentes estudian a los políticos para llegarles y ponerse a su lado.-