BRUSELAS.- La OTAN instó este martes a Bielorrusia a liberar al periodista disidente Román Protasevich, detenido este domingo en Minsk tras forzar el aterrizaje del avión en el que viajaba, y pidió una “investigación internacional urgente” de ese suceso, que calificó de “secuestro estatal”.
“El aterrizaje forzoso de un avión de pasajeros fue peligroso e inaceptable”, indicó el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, antes de que el Consejo del Atlántico Norte, el máximo órgano de toma de decisiones de la Alianza se reuniera y abordara lo acontecido.
Stoltenberg recalcó, durante una comparecencia de prensa en el cuartel general de la Alianza junto a la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, que se ha tratado de un “secuestro estatal” de un avión comercial por parte de las autoridades bielorrusas.
Esto demuestra, en su opinión, “cómo el régimen de Minsk ataca los derechos democráticos básicos” y mina la libertad de expresión y a los medios independientes.
Los 30 aliados decidieron añadir la cuestión del aterrizaje forzoso en la capital bielorrusa del vuelo de Ryanair de Atenas a Vilna, en el que el periodista era uno de sus 120 pasajeros, a la agenda de su reunión rutinaria de este martes, según fuentes de la organización.
LIBERACIÓN DEL PERIODISTA Y SU PAREJA
Stoltenberg urgió igualmente al régimen de Alexandr Lukashenko a liberar “inmediatamente” a Protasevich y a su pareja, Sofía Sapega, estudiante rusa de la Universidad Humanitaria Europea de Vilna, que fue arrestada junto a él.
Protasevich, de 26 años, es un estrecho colaborador de la líder de la oposición bielorrusa Svetlana Tikhanóvskaya y, como ella, huyó de Bielorrusia para residir en Lituania.
La disidente denunció hoy que el periodista está “sometido a torturas”, mientras que la ONU afirmó que teme por su seguridad después de su aparición el lunes en la televisión estatal, en la que se percibían heridas en su rostro.
INVESTIGACIÓN INTERNACIONAL URGENTE
Stoltenberg volvió a pedir hoy, como ya había solicitado el domingo a través de la red social Twitter, que haya “una investigación internacional urgente” sobre el suceso.
Por su parte, Bielorrusia invitó este martes a los reguladores internacionales de aviación civil, a la Unión Europea (UE) y a Estados Unidos a investigar el incidente.
Según Minsk, fue el piloto del Boeing 737-800 de Ryanair quien “tomó su propia decisión de aterrizar en el Aeropuerto Nacional de Minsk sin presión alguna de la parte bielorrusa”, de acuerdo a un comunicado del Departamento de Aviación del Ministerio de Transporte de Bielorrusia.
El país ha invitado a esclarecer lo ocurrido a los representantes de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).
En todo caso, Bielorrusia insiste en que el 23 de mayo el aeropuerto de Minsk recibió un correo electrónico con una amenaza de bomba firmado por el movimiento palestino Hamás, que no obstante hoy ha desmentido ese extremo.
TENSIONES CON BIELORRUSIA
Lukashenko, considerado el último dictador de Europa y respaldado por Rusia, mantiene un pulso con la comunidad internacional desde que fue reelegido como presidente del país en agosto pasado en unos comicios calificados de fraudulentos y que desataron oleadas de protestas populares, duramente reprimidas por las autoridades.
La OTAN rechazó además entonces la afirmación del dirigente bielorruso de que los aliados estaban acumulando refuerzos en las cercanías de las fronteras del país