SAN JUAN. – Seis países del Caribe Oriental (Anguila, Dominica, Granada, Montserrat, San Cristóbal y Nieves y Santa Lucía) han sido considerados seguros para que viajen los ciudadanos de los Estados Unidos, según recogen este miércoles medios regionales.
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) de Estados Unidos informó que los países de la región que no tienen un aviso por riesgo de contraer el coronavirus son los citados, ya que la entidad sanitaria estima que la probabilidad de contagiarse en estos territorios es “muy baja”.
Sin embargo, el CDC ha incluido en el nivel 3 de alerta a las Islas Vírgenes Británicas, Antigua y Barbuda, Barbados, Guadalupe, Martinica, Puerto Rico, San Martín, Saint Maarten, Trinidad y Tobago, Islas Turcas y Caicos y las Islas Vírgenes de los Estados Unidos.
El CDC detalla que el nivel 3 significa que la probabilidad de contraer el virus es “alta”.
Otros países del Caribe también figuran en el nivel 3 de alerta de la agencia estadounidense.
Para estos países, el CDC pide a los viajeros de Estados Unidos “evitar” desplazarse y posponer los viajes no esenciales.
Estados Unidos emite regularmente advertencias y alertas de viaje sobre países debido a la criminalidad y los desastres naturales.
Esto no significa que las personas tengan prohibido visitar cualquiera de estos países sobre los que existe advertencia.
Debido a la pandemia, casi todos los países del mundo han sido incluidos en las recomendaciones de viaje covid-19 del CDC.
La región caribeña es una de las áreas del mundo menos golpeada por la pandemia de la covid-19, aunque las diferencias entre países son muy grandes, con territorios como Bahamas, Jamaica, Guyana o Trinidad y Tobago como los más castigados.
Países como Bahamas y Jamaica abrieron sus fronteras durante el mes de julio con el objetivo de favorecer al sector turístico, básico para sus economías, pero a partir de esa fecha los casos se dispararon, lo que obligó a volver a medidas de confinamiento tomadas en marzo.
Los territorios más pequeños han sido, de momento, los menos afectados, principalmente por los fuertes controles fronterizos establecidos.