SANTO DOMINGO.- A un año y cuatro meses de la desaparición de su hijo Ángel Alfonso Mota Jiménez, de 26 años de edad, el señor Ángel Mota López pide la ayuda de las autoridades para dar con el paradero de su vástago, y no pierde la esperanza de encontrarlo sano y salvo, a pesar de no saber absolutamente nada por todo ese tiempo.
Su hijo, conocido como “Fonso”, tiene una discapacidad y condiciones especiales. Desapareció el 17 de mayo de 2019, cuando fue enviado por su padre con un chófer de transporte público de confianza, desde la comunidad de los Mapolos a Sabana Grande de Boyá. Al llegar habría sido enviado a su casa con otro pasajero de nacionalidad haitiana, quien lo habría dejado a unas cinco calles de su casa; pero Ángel nunca regresó a su vivienda.
“La familia estamos consternados en ese caso, no tenemos felicidad desde ese tiempo, tanto la madre como yo, los hermanos, los amigos y el pueblo de Sabana Grande de Boyá. No sabemos las circunstancias ni qué estará pasando”, dice en un video que circula en redes sociales.
Familiares, amigos y allegados han buscado en diferentes partes del país, como Nagua, Santo Domingo, Haina, San Cristóbal, Cotuí, Baní, San Pedro de Macorís, Samaná y todos los municipios de la provincia Monte Plata; y les han avisado que han visto una persona parecida al desaparecido.
Visiblemente triste, resistiendo las lágrimas, el progenitor solicita nueva vez a la ciudadanía que lo ayuden a encontrar a su hijo, ya que llevan todo este tiempo sufriendo sin saber qué ha sucedido.
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