MIAMI.– Florida contabilizó 173 fallecimientos por COVID-19 en las últimas veinticuatro horas, un nuevo récord en el estado, mientras que los contagios diarios ascendieron a 10.249 después de tres días consecutivos en los que no se superó la barrera psicológica de los 10.000.
Los condados de Miami-Dade, Broward y Palm Beach, en el sureste, concentraron el 48,78 % de los nuevos contagios.
En Miami-Dade hubo 2.723 casos nuevos y con ellos la cifra acumulada desde el 1 de marzo llega a 95.068 casos, con un total de 1.354 con resultado de muerte.
Sin embargo, las autoridades locales se mantienen optimistas y comienzan a ver que la curva se “aplana”, como dijo ese jueves el alcalde de la ciudad de Miami, Francis Suárez, en una rueda de prensa.
Suárez aseguró que están viendo que el número de nuevos contagiados diarios en la ciudad, la más poblada de Miami-Dade, ha pasado de 125 en el pico de la pandemia hasta 20 en el día de hoy.
El alcalde dijo que la norma de llevar mascarilla en lugares públicos “está funcionando” y si esta tendencia se mantiene el número de contagios positivos estará por debajo del 10 % dentro de treinta días, descartando así una posible cuarentena.
Desde que entró en vigor en Miami la norma de las mascarillas se han impuesto un total de 115 multas que van desde los 50 dólares hasta los 500 y se han cerrado temporalmente un total de 15 negocios tras realizar 431 inspecciones.
LA MASCARILLA PARA CLIENTES NO ES OBLIGATORIA A NIVEL ESTATAL
Sin embargo, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, dijo este jueves que el uso de la mascarilla dentro de comercios minoristas de momento no será un requisito a nivel estatal.
Durante una conferencia de prensa en el Centro Médico Regional Holmes de Health First en Melbourne (condado de Brevard, de la costa este), DeSantis también afirmó que no implementará otras restricciones en los negocios.
“Seguiremos aconsejando, pero no impondremos penalidades criminales, no creo que eso sea efectivo”, expuso DeSantis.