NUEVA YORK.- El debate sobre el racismo generado en Estados Unidos por la muerte de George Floyd a manos de la Policía se dirime en las calles, pero también en las redes sociales, donde el sector empresarial y la población blanca se han movilizado de una forma sin precedentes para exigir justicia, informaron este miércoles en medios locales.
“Esto parece diferente”, explica a Efe Emma Hovel, una diseñadora gráfica de Nueva York, que compara la situación con el estallido del movimiento #MeToo. “Son dos problemas que todos sabíamos que estaban ahí, pero muchos, sobre todo gente más mayor, pensaban que era casi imposible lograr algo. Esto tiene un tamaño que da la sensación de que algo realmente puede cambiar”.
Plataformas como Instagram y Twitter se han llenado en los últimos días de mensajes de apoyo a los manifestantes, de llamamientos a donar a organizaciones vinculadas a las protestas y de reflexiones sobre la violencia policial de la que son objeto los afroamericanos.
Muchos de ellos provienen de activistas y personas habitualmente comprometidas a través de las redes, pero muchos otros son de ciudadanos anónimos, gente poco dada a tratar en sus perfiles asuntos políticos o sociales, que ahora sienten que tienen que pronunciarse públicamente.
EL SILENCIO ES COMPLICIDAD
“La realidad es que vivimos nuestras vidas en redes sociales y, si guardas silencio aquí, donde la gente que está en tu vida pero que no te ve a diario interactúa contigo, estás señalándoles tus prioridades”, explica Julia, una joven neoyorquina a través de Instagram.
“White silence = white violence” (“Silencio blanco = violencia blanca”) es una consigna compartida por ella y por otros muchos para urgir a todos sus conocidos a posicionarse de una manera mucho más clara en contra del racismo y de la violencia policial.
Las redes ya se habían llenado de apoyo a esta causa en años anteriores y tras otras muertes de personas negras a manos de agentes que conmocionaron al país, pero nunca con este volumen.
Este martes se produjo el que es hasta ahora el ejemplo más claro de esta nueva movilización, con las redes sociales como Instagram tiñéndose de negro en solidaridad con el movimiento Black Lives Matter (“Las vidas negras importan”, en inglés).