MADRID.- Madrid amanecía este miércoles con sol y un calor impropio de estas fechas, pero también con el miedo lógico del avance del coronavirus, ese bicho al que ya todos conocemos por su nombre. Hace 16 años, un 11 de marzo la capital se despertó con miedo, el miedo de la masacre que segó la vida a 191 personas en el mayor ataque terrorista de Europa.
Dos 11 de marzo diferentes, pero a los que ha unido el miedo. El 11 de marzo de 2004 nada hacía presagiar la tragedia que inundó de silencio una ciudad siempre bulliciosa. Hoy, 11 de marzo de 2020, también Madrid estaba más callada, con los más pequeños recluidos en sus casas y los mayores haciendo teletrabajo. Los que pueden, claro.
Hoy, como desde hace años, la puerta de Murillo del parque del Retiro ha sido la entrada oficial del acto conmemorativo de los atentados terroristas del 11M, el homenaje que la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) celebra cada año en el Bosque del Recuerdo.
Como otros años estaban apostadas las mismas “furgonas” de la Policía Nacional -imposible el teletrabajo para los agentes-, era el mismo el espacio el reservado para los coches oficiales, también era el mismo el equipo de la AVT el que organizaba e pasillo y a los periodistas…(por cierto, estos bastante numerosos).
Todo preparado como siempre, pero el maldito virus también se ha hecho notar y la afluencia de público ha sido bastante más reducida que en los otros aniversarios. Menos uniformes de las fuerzas de seguridad, menos políticos, menos familiares de víctimas…