El movimiento Bien Común se sumó al rechazo del llamado a diálogo hecho a través del Consejo Económico y Social (CES), para buscar una solución a la crisis institucional que vive el país tras la suspensión de las elecciones del 16 de febrero.
Bien Común manifestó que el CES es un órgano consultivo que opera bajo la sombrilla del Poder Ejecutivo.
El colectivo refutó los acuerdos a los que llegaron los representantes del Comité Ejecutivo del CES ayer, entre estos el de limitar la participación de los jóvenes movilizados a ¨observadores del diálogo¨.
Bien común pidió la renuncia inmediata del CES de Agripino Núñez Collado e Iraima Capriles como presidente y directora ejecutiva, respectivamente, porque considerar que ambos llevan 15 años en el cargo, luego de que fueran designados “a dedo” por un decreto del entonces presidente Leonel Fernández, en el año 2005.
Asimismo, solicitó el retiro inmediato del diálogo de los actores políticos, según afirman, altamente cuestionados, como por ejemplo José Ramón Peralta, Juan Temístocles Montas y Reinaldo Pared Pérez.
“Estos políticos mañosos son señalados en escándalos de corrupción y manejo irregular de recursos públicos”, manifestaron en un documento leído por la candidata a regidora por el Frente Amplio, Heidy Adón.