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LIMA (EFE).- Giulliana Loza, la abogada de la líder opositora Keiko Fujimori, afirmó este jueves que los hechos imputados por la Fiscalía contra la excandidata no constituyen delito y que no hay una “sospecha fuerte” del presunto lavado de activos por los aportes de la firma brasileña Odebrecht a sus campañas del 2011 y 2016.
Durante la tercera audiencia judicial en la que el magistrado Víctor Zúñiga analiza el pedido de prisión preventiva por 36 meses contra Fujimori, la abogada Loza agregó que “no hay peligro de fuga ni obstrucción a la justicia” por parte de su defendida.
Loza añadió que, en este segundo pedido de prisión preventiva, el fiscal José Domingo Pérez debía haber presentado “suficientes elementos de convicción de la comisión de un delito”, los cuales en su opinión no han existido.
“No hay una mención, ni relación con Keiko Fujimori en las declaraciones” de testigos y colaboradores presentadas por Pérez, indicó la abogada.
De esa forma, Loza desestimó los interrogatorios hechos por el fiscal a una serie de empresarios que reconocieron haber hecho aportes económicos para las campañas de Fujimori, así como la relación familiar del magistrado del Tribunal Constitucional, José Luis Sardón, con uno de los falsos aportantes al partido fujimorista.
Keiko Fujimori recuperó su libertad el pasado 29 de noviembre gracias a un fallo del Tribunal Constitucional, después de pasar 13 meses en prisión preventiva por este caso.
En declaraciones a los periodistas al final de la audiencia, Loza expresó que el fiscal Pérez “ha mentido y se ha contradicho” y es claro que “no tiene un caso” contra Fujimori.
