SANTO DOMINGO. -. Una mujer imputada de lanzar agua caliente sobre el cuerpo de su hija de 11 años, supuestamente porque la menor no lavó ropa interior, fue condenada a 30 años de reclusión mayor, por un tribunal de primera instancia.
La condena le fue impuesta a Betanía Ferreras Castillo, de 35 años de edad, madre de cinco hijos, domiciliada en Santo Domingo Norte.
La mujer fue encontrada culpable de actos de tortura y barbaries, en perjuicio de su hija de 11 años, cuya identidad se omite por razones legales y la cual tuvo que ser ingresada en un centro de salud en la capital, con quemaduras de segundo grado.
La sentencia fue dictada por el Primer Tribunal Colegiado de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia de la provincia Santo Domingo.
Según el expediente, el hecho ocurrió el 19 de mayo del presente año, y las autoridades del Ministerio Público tomaron conocimiento a través de la Línea Vida, de que la señora ahora condenada, agredió a su hija menor, tirándole una olla de agua caliente.