PEKÍN.- Argentina logró su pase a la final de Mundial de baloncesto de China tras derrotar por 80-66 a Francia, que -a pesar de destellos aislados- se vio superada por el empuje incesante de los sudamericanos y, en particular, del incombustible Scola.
El encuentro se caracterizó más por la buena defensa que por el ataque y ambos conjuntos terminaron con tanteos por debajo de lo promediado durante el torneo.
Salvo Scola, quien incluso amplió sus registros con 28 puntos y 13 rebotes. El veterano baloncestista argentino fue el alma del equipo, una vez más.