EDIMBURGO, REINO UNIDO.- El primer ministro británico, el conservador Boris Johnson, consiguió este miércoles ganar su primera batalla legal, después de que la Justicia escocesa dictaminara que actuó legalmente al decidir suspender temporalmente el Parlamento de Westminster (Londres).
El Tribunal de Sesiones de Edimburgo consideró que la acción de clausurar la Cámara de los Comunes “no contraviene la ley”, porque es un poder reservado al Ejecutivo, y precisó que sus implicaciones se constriñen únicamente al ámbito político y no al judicial.
“Este es un territorio político y la toma de decisiones no puede medirse con estándares legales, sino solo con valoraciones políticas. La rendición de cuentas (por parte del Gobierno) corresponde al Parlamento y, en última instancia, al electorado, no a los tribunales”, sostuvo el juez Lord Raymond Doherty.
El veredicto permite al “premier” seguir adelante con el calendario previsto, de modo que las sesiones de las cámaras se interrumpirán entre el 10 de septiembre y el 14 de octubre, cuando reabrirán tras el “Discurso de la reina”, el acto que el Ejecutivo utiliza para detallar el programa político del siguiente ejercicio.
La diputada del Partido Nacionalista Escocés (SNP) Joanna Cherry, que ha liderado la demanda, afirmó en Twitter que considera que el juez “ha cometido un error de ley en este punto y en otros” y confirmó que los demandantes buscarán “apelar de inmediato”.