, SANTO DOMINGO.- Debutó anoche en Grandes Ligas, con los Cachorros de Chicago, Robel García, quien se convirtió en el dominicano 770 en alcanzarlo desde que su compatriota Osvaldo Virgil lo hiciera en el 1956.
García, quien es nativo de Las Matas de Farfán, municipio de San Juan de la Maguana, y juega en el cuadro interior, hizo su debut como bateador emergente recibiendo un ponche.
La llegada de García al máximo nivel del béisbol organizado tiene una connotación especial si se analiza los tropiezos recibidos para poder lograrlo.
Y es que el debutante tras cuatro años en la finca de los Indios de Cleveland fue dejado libre en el 2014 por mientras se encontraba en Mahoning Valley, sucursal Clase A corta en el estado de Ohio.
Tras su despedida el jugador de 26 años de edad retornó al país y de inmediato fue a probar suerte en la academia de Hiroshima Toyo Carp, en San Pedro de Macorís, como resalta un trabajo publicado en este mismo medio bajo la firma de Antonio Puesán,
Puesán resaltó que García pasó un año entrenando y al ver que no fue enviado a Japón decidió moverse a Puerto Plata para jugar en la Liga de Verano de la Federación Dominicana de Béisbol, con los Tiburones del Norte en 2015.
De ahí se marcha a Italia donde tiene familiares y empezó a jugar en las menores de la liga profesional italiana (IBL), con el Bologna de la Serie A1 donde recibe la oportunidad de jugar con el equipo nacional de ese país, en 2017.
“La selección Italiana me hace ciudadano italiano y estuve a punto de participar en el pasado Clásico Mundial del 2017, pero mis documentos no llegaron a tiempo”, le contó García a Puesán.
El jugador narró que durante el mes de octubre del 2018 mientras accionaba en los entrenamientos de la selección italiana en Estados Unidos fue observado por Andrew Bassett, asistente de pro Scouting de los Cachorros de Chicago y le ofreció un contrato de liga menor el 31 de Octubre.