SANTO DOMINGO.– El Congreso volvió a ser fuertemente militarizado este martes ante posibles manifestaciones en sus alrededores en contra de una eventual reforma a la Constitución.
Además de las verjas perimetrales fueron colocadas otra vez las cárceles móviles y unidades del 911.
A los senadores y diputados se les ha dificultado el acceso al órgano legislativo, el cual ha sido acordonado por policías y militares en un perímetro que se extiende hasta tres calles.
Se recuerda que el presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez, afirmó que no va a ordenar el retiro de policías y militares del entorno del Congreso mientras persista la amenaza de que personas pretenden ocupar ese espacio porque supuestamente se someterá el proyecto de reforma constitucional.
Reinaldo reiteró ante el hemiciclo que la decisión de acordonar el área del Congreso fue porque el ministro de Defensa y el director de la Policía, Rubén Darío Paulino Sen y Ney Aldrin Batista, respectivamente, les comunicaron a él y al presidente de la Cámara de Diputados que tenían información de una ocupación.
“Hasta tanto esa circunstancia no desaparezca, no voy a proceder a dar instrucciones para el retiro”, señaló Pared Pérez.