MADRID.- La Policía española investiga el suicidio en Madrid de una mujer de 32 años tras hacerse viral un vídeo suyo grabado hace cinco años de contenido sexual.
La mujer, casada y madre de dos hijos, se quitó la vida el pasado sábado al no superar la presión que supuso que las imágenes se difundiesen entre gran parte de la plantilla de la empresa en la que trabajaba e incluso llegaran a su marido.
La Policía investiga si fue ella la que grabó el vídeo o si lo hizo alguien con su consentimiento o sin él, así como quienes fueron los autores de la difusión, que podrían enfrentarse a un delito contra la intimidad.
El Código Penal español castiga con entre tres meses y un año de cárcel la difusión de imágenes privadas sin autorización de la persona afectada cuando se viole gravemente su intimidad y aunque la víctima diera en su día su consentimiento a la grabación.
Los trabajadores de la fábrica, en la que trabajaba la fallecida, que cuenta con una plantilla de 2.500 personas, se concentraron este miércoles en repulsa por su muerte.
Por su parte, el sindicato Comisiones Obreras (CCOO) anunció en un comunicado que denunciará a la empresa por no activar el protocolo de acoso sexual en el caso de la trabajadora, ya que considera el caso como un accidente laboral.