SAN JUAN.- Las autoridades sanitarias de Curazao estudian las condiciones en las que aceptarían la llegada del barco crucero de la Iglesia de la Cienciología “Freewinds”, que anoche partió de Santa Lucía tras dos días en cuarentena después de que se detectara un caso de sarampión en uno de sus tripulantes a bordo.
Se espera que la embarcación llegue a Curazao, donde tiene su base, este sábado, informaron hoy medios locales, que indicaron que también existe la posibilidad de que el barco no sea aceptado y no pueda atracar.
Por otro lado, “Freewinds”, propiedad y operado por la citada Iglesia, informó este viernes a su agente local Bryson’s Shipping que había decidido suspender su visita a Antigua y Bermuda prevista entre el 7 y el 9 de mayo, indicó la citada empresa de viajes de barco local.
Varios medios locales en Santa Lucía revelan hoy que las autoridades médicas del barco solicitaron anoche, antes de partir, cien dosis de vacunas contra el sarampión.
Desde Antigua, la máxima responsable médica de la isla, Rhonda Sealey Thomas, aseguró hoy a la población, en un comunicado, que el gobierno está comprometido con hacer todo lo que sea posible para asegurar que no haya una epidemia de sarampión en Antigua y Barbuda.
“Estamos al tanto de la situación en Santa Lucia y vamos a tomar cualquier medida sanitaria necesaria para evitar que se introduzca cualquier enfermedad amenazante en Antigua y Barbuda”, agregó.
A bordo de la embarcación, de acuerdo con varias fuentes, se encuentran 300 pasajeros.
El “Freewinds”, de acuerdo con la página web de la propia Iglesia de la Cienciología, es un barco de 11 metros radicado en el Caribe.