CHRISTCHURCH (N. ZELANDA).- Mucad Ibrahim, un niño de 3 años, y Abdullahi Dirie, de 4, son las víctimas más jóvenes del tiroteo de un supremacista blanco contra dos mezquitas en la ciudad neozelandesa de Christchurch que causaron 50 muertos y 50 heridos el pasado viernes.
Aunque las autoridades aún no han hecho públicos los nombres de las víctimas, los medios locales han ido revelando las identidades de algunos fallecidos en los brutales ataques terroristas perpetrados supuestamente por el australiano Brenton Tarrant.
Las víctimas incluyen a residentes, refugiados e inmigrantes de origen, en su mayoría, turco, sirio, somalí, indio, bangladesí, malasio y afgano, entre otros.
“Verdaderamente pertenecemos a Dios y a él regresaremos – te echaré de menos, querido hermano”, escribió en su página de Facebook Addifatah, hermano de Mucad, quien falleció en la mezquita de Al Noor.
Abdullahi, el hijo de una familia que emigró a Nueva Zelanda desde Somalia, murió debido a las heridas de bala del atacante, mientras que sus cuatro hermanos y su padre sobrevivieron a la masacre, según el diario New Zealand Herald.
La ONG Syrian Solidarity New Zealand confirmó que Khaled Mustafa, un refugiado sirio, murió junto con su hijo Hamza, de 16 años, en Al Noor, mientras que su otro hijo resultó herido y tuvo que ser operado de urgencia.
La madre de Hamza explicó a los medios que su hijo estaba hablando con ella por teléfono cuando fue tiroteado.