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PEKÍN.- Las autoridades chinas han detenido a 576 personas por contrabando de basura procedente del extranjero entre enero y octubre, período en el que se han incautado de un total de 1,46 millones de toneladas de materiales, informó hoy la agencia estatal Xinhua.
Estas operaciones se enmarcan dentro de la nueva normativa que entró en vigor el pasado enero y que prohíbe la entrada a China de 24 tipos de residuos agrupados en cuatro categorías (plásticos domésticos, papel sin clasificar, varios tipos de escoria de minas y desechos textiles) para garantizar la sostenibilidad medioambiental.
“Es responsabilidad de todos los países y regiones luchar contra el contrabando transfronterizo de los desechos sólidos”, afirmó el responsable de la Administración General de Aduanas, Ni Yuefeng, que aseguró que los esfuerzos gubernamentales para lograrlo se mantendrán a largo plazo.
Como parte de la lucha contra la contaminación y la denominada “basura extranjera”, China anunció recientemente una nueva prohibición -que entrará en vigor el próximo 30 de diciembre- a las importaciones de materiales o artículos como el titanio, la madera, los artículos de ferretería, barcos y desechos de acero inoxidable, entre otros.
Las autoridades denuncian que algunas compañías han introducido en el país asiático residuos procedentes del extranjero para lucrarse, lo que ha supuesto una amenaza para el medioambiente y la salud pública.
En la década de 1980, China comenzó a importar desechos sólidos como fuente de materias primas y durante años ha sido el mayor importador mundial, a pesar de su escasa capacidad en la eliminación de basuras.
