Nueva York, EE.UU. .- La competencia por el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Americana en el 2018 ha arrojado como finalistas a tres jugadores bien completos con Mookie Betts, el dominicano José Ramírez y Mike Trout. Cada uno se voló la cerca más de 30 veces y se robó más de 20 bases, además de exhibir una sólida defensa en sus respectivas posiciones. Nombrar al JMV de esta terna no es nada fácil, pero es exactamente lo que sucederá cuando el ganador sea anunciado este jueves a las 6 p.m. ET por MLB Network. Echémosles un vistazo a los argumentos de cada uno de los finalistas para llevarse este codiciado trofeo.
Mookie Betts, Medias Rojas
Betts es un jugador de cinco herramientas que parece tener todas las credenciales para alzarse con su primer trofeo como Jugador Más Valioso de la Liga Americana a la edad de 26 años. Betts, quien permaneció como primer bate durante toda la temporada para los campeones Medias Rojas, tuvo el mejor WAR (10.4) para un jugador de posición desde Barry Bonds en el 2004 (11.9).
Tras finalizar en el segundo puesto en las votaciones para JMV de la Liga Americana detrás de Trout hace dos años, Betts regresa con una candidatura más sólida esta vez. El jardinero derecho impactó de todas las maneras posibles, llevándose la corona de bateo con promedio de .346 junto a 47 dobles, cinco triples, 32 cuadrangulares, 129 carreras anotadas, 80 producidas y 30 bases robadas. Su OPS de 1.078 fue el segundo mejor de las Mayores solamente detrás de Trout (1.088), y Betts se llevó su tercer Guante de Oro consecutivo por su excelencia defensiva.
Los números de Betts fueron extraordinarios. Tuvo promedio de .364 en casa y de .331 en la ruta. Sacudió 13 jonrones en el Fenway Park y 19 en la carretera. Ante pitchers zurdos, Betts tuvo OPS de 1.207. Contra derechos, fue de 1.037. Betts bateó al menos .330 en cada mes excepto junio, cuando dejó un respetable .290.
“Tiene un impacto en el juego como ningún otro jugador en Grandes Ligas -corriendo las bases, jugando defensa, bateando para poder”, elogió el dirigente de los Medias Rojas, el puertorriqueño Alex Cora. “Ahí están los números. Fue una temporada especial para él”.
José Ramírez, Indios
Ramírez se dio a conocer hace un par de campañas, cuando sorprendió al mundo del béisbol con un desempeño que lo llevó a finalizar en el tercer lugar en las votaciones para JMV de la Liga Americana. El estelar de los Indios demostró este año que su extraordinaria actuación con el madero no fue una casualidad.
Una vez más, Ramírez aspira a llevarse el codiciado trofeo de JMV. Y con justa razón, ya que solamente Betts (10.4) y Trout (9.8) superaron el 8.0 de WAR (según FanGraphs) que el toletero ambidiestro de Cleveland registró en el 2018.
Ramírez también fue finalista para llevarse el Guante de Oro por la Liga Americana en la tercera base y se adjudicó el Bate de Plata por segundo año seguido. Camino a agosto, el quisqueyano lucía como el favorito para llevarse el trofeo de JMV en la Liga Americana, pero una baja ofensiva en los últimos doso meses afectaron sus bonos en la votación. A pesar de ello, los números generales de Ramírez esta pasada campaña fueron sensacionales.
En 157 compromisos, Ramírez bateó .270 con promedio de embasarse de .387 y slugging de .552 junto a 39 jonrones, 38 dobles, 34 bases robadas, 105 carreras empujadas, 110 anotadas y 106 bases por bolas recibidas (comparado con 80 ponches). Ramírez compiló todos esos números a pesar de batear .202 con OPS de .724 en los últimos 50 juegos de la temporada.
El WAR de 8.0 de Ramírez fue el más alto para un toletero de la Tribu desde 1953 (Al Rosen, 9.1) y quedó empatado como el 12do más alto en una temporada en la historia de la franquicia. Ramírez también se unió a Bonds (1992, 1995 y 1997), Jeff Bagwell (1997, 1999) y Bobby Abreu (2001, 2004) como los únicos jugadores en la historia de Grandes Ligas en conectar al menos 30 cuadrangulares, robarse 30 bases, producir 100 carreras, anotar 100 veces y recibir 100 boletos gratis en una sola campaña.
Mike Trout, Angelinos
Un ejemplo de consistencia, Trout se ha establecido como un candidato fijo al premio de JMV en la Liga Americana a lo largo de sus primeras siete temporadas completas con los Angelinos, y ya se ha llevado a casa el prestigiado trofeo dos veces, en el 2014 y el 2016. Ha quedado entre los tres finalistas para llevarse el galardón por sexta vez en su carrera tras caer al cuarto lugar la campaña pasada debido a una lesión en un pulgar que lo obligó a perderse siete semanas de la temporada regular.
Ampliamente considerado el mejor jugador de Grandes Ligas, Trout viene de tener la que él considera su temporada más redonda hasta la fecha. Tuvo promedio de .312 y lideró las Mayores con 1.088 de OPS, además de conectar 39 jonrones, producir 79 carreras y robarse 24 bases en 140 juegos del 2018. Trout también impuso marcas personales en porcentaje de embasarse (.460), OPS+ (199) y bases por bolas (122), y compiló el segundo WAR más alto (9.8) en la Gran Carpa, de acuerdo con FanGraphs, sólo detrás de Betts (10.4).
El incansable esfuerzo de Trout por ser cada vez mejor quedó en evidencia tras tomarse tiempo extra para trabajar en su defensa en el jardín central. Tras registrar menos-6 Carreras Salvadas a la Defensa en el 2017, Trout se enfocó en partirle con mayor rapidez a los batazos conectados hacia su zona y jugar de manera más agresiva este año. Su esfuerzo dio resultados, ya que fue nominado al Guante de Oro por primera vez desde el 2015.
“Logró su objetivo”, declaró el gerente general de los Angelinos, Billy Eppler, en octubre. “Es excepcional. Un extraordinario pelotero y un gran ser humano”.
Fuente: MLB