El Banco Central afirmó que la economía sigue evolucionando favorablemente, con un crecimiento interanual entre 6 y 6.5 por ciento y con las presiones inflacionarias con tendencia a la moderación.
Por ese panorama de crecimiento continuo y estabilidad de precios internos, el BCRD mantuvo en 5.50% su tasa de política monetaria, luego de realizar un exhaustivo análisis de la economía. Ese análisis determinó que la economía “continúa evolucionando favorablemente, con fundamentos macroeconómicos fuertes reflejados en un alto crecimiento y baja inflación”. El análisis también determinó que marchan bien, los procesos de consolidación en las cuentas fiscales y externas.
Crédito moderado
“Luego de las medidas monetarias recientes, el crédito al sector privado en moneda nacional ha moderado su expansión interanual en torno a 12.5 % al mes de septiembre”, indica el BCRD en su documento de política monetaria.
Expresa que según el sistema de pronósticos del Banco Central, la actividad económica mantiene su dinamismo con un crecimiento interanual en 2018 en el rango de 6.0 % – 6.5 %, mientras que la inflación se ubicaría en torno al límite inferior de la meta al cierre de este año. “Para el próximo año, se proyecta que el crecimiento económico converja a su potencial y que la inflación se aproxime al centro de la meta”, dice.
En su reunión de política monetaria de septiembre pasado, la sustentación de mantener la tasa de política monetaria en 5.5% la decisión fue un análisis detallado del balance de riesgos en torno a las proyecciones de inflación, incluyendo los principales indicadores macroeconómicos nacionales, las expectativas del mercado, el entorno internacional relevante y los pronósticos de mediano plazo”.
Destaca que “en los meses recientes, las presiones inflacionarias se han moderado”, y cita que la inflación acumulada al mes de agosto se ubicó en 1.44 %.
Generadores de edivisas con buen aporte
El BCRD destaca por el lado de la política fiscal, que una moderación del gasto público, junto a ingresos tributarios según lo presupuestado, ha llevado a un déficit del Sector Publico No Financiero a 0.2 % del PIB al mes de julio. En el sector externo, el impulso de las actividades generadoras de divisas ha contribuido a moderar el impacto de los mayores precios del petróleo.