NUEVA YORK. La Justicia estadounidense acusó hoy formalmente a un ciudadano ruso de haber transferido de forma ilegal componentes electrónicos al Ejército de Rusia y a agencias de inteligencia del país durante años.
El acusado, de 72 años y residente en Moscú, es buscado por las autoridades de EE.UU. por cargos de conspiración para el blanqueo de dinero, de conspiración para el contrabando de bienes y de conspiración para violar una ley que regula el comercio de ese tipo de productos.
La acusación oficial fue aprobada hoy por un gran jurado de Newark (Nueva Jersey), según informó la fiscalía federal.
Según EE.UU., Alexander Brazhnikov Sr. era uno de los responsables de una red que pasó de contrabando a Rusia componentes electrónicos por valor de más de 65 millones de dólares.
Su hijo Alexander Brazhnikov Jr., residente en Nueva Jersey, se declaró culpable de participar en esa trama y fue condenado en 2016 a 70 meses de cárcel.
Según la acusación, entre 2010 y 2014 padre e hijo utilizaron una empresa rusa y cuatro sociedades estadounidenses para adquirir en EE.UU. grandes cantidades de componentes electrónicos y exportarlos a Rusia.
Con el fin de esconder esas actividades, los productos se enviaban a direcciones falsas en Moscú y luego se llevaban a un almacén central, desde el que se distribuían a varias compañías.
Entre esos negocios había empresas autorizadas a suministrar partes al Ministerio de Defensa, al espionaje ruso y a entidades involucradas en el diseño de cabezas nucleares y otras armas, según la fiscalía.
Brazhnikov, que no ha sido detenido, se enfrenta a penas máximas de 20 años de cárcel por el cargo de blanqueo de dinero, otros 20 años por el de violación de la ley comercial y 5 más por el de contrabando.