SANTIAGO DE CHILE. La Fiscalía chilena alistó 158 nombres de personas vinculadas con la Iglesia en el país involucradas en más de 200 casos de abusos sexuales desde el 2000, 178 de ellos menores, una pesquisa que ha sacado a la luz pública la gravísima situación existente en el clero chileno.
La coyuntura se ha tornado “tan oscura” para la Iglesia católica local que el papa Francisco decidió enviar en febrero a su emisario a Chile, el arzobispo Charles Scicluna, quien posteriormente regresó a Italia con un informe de 2.300 páginas bajo el brazo, estudio al que ahora la Fiscalía pretende hurgar si es que el pontífice accede a enviar esos antecedentes.
Este lunes el organismo reiteró que solicitará más informes al Vaticano referidos esta vez a los procesos canónicos de ocho personas investigadas por distintos abusos sexuales cometidos contra niños, niñas o adolescentes registrados en Valparaíso, La Araucanía y la región metropolitana de Santiago.
Frente a este sombrío panorama, la Conferencia Episcopal de Chile sostuvo ayer que llamará para la próxima semana a una asamblea extraordinaria con el fin de tratar la situación en el seno de la Iglesia.
“La Conferencia Episcopal ha venido desarrollando todo un itinerario para poder definir propuestas y caminos concretos que tengan que ver con esta herida pendiente que el papa Francisco dejó muy claro en su carta al pueblo de Dios que peregrina en Chile”, dijo este lunes el portavoz de la Conferencia Episcopal, el diácono Jaime Coiro.
El Ministerio Público informó ayer que investiga a 158 personas relacionadas con la Iglesia católica en el marco de 144 casos de abusos sexuales o de otro tipo contra 266 víctimas en Chile.