NUEVA YORK. Con protección de varios policías, la bodega “Cruz & Chucky”, donde fue asesinado el estudiante dominicano Lesandro Guzmán Feliz (Junior) por pandilleros de Los Trinitarios, fue reabierta ayer lunes para labores de limpieza.
Modesto Cruz, propietario del establecimiento y quien ha dicho sentirse amenazado por parte de los indignados comunitarios de la vecindad, no acudió a supervisar los trabajos y en su lugar estuvo el dirigente de la Asociación de Bodegueros, Francisco Marte, quien llegó acompañado de dos trabajadores que barrieron, limpiaron los pisos, botaron basura y alimentos dañados.
La limpieza de la bodega se realizó un mes después de que Lesandro fuera sacado arrastrado fuera de la bodega y asesinado brutalmente por los pandilleros que usaron cuchillos y machetes.
Marte explicó que los productos no perecederos que estaban en las neveras y refrigeradores hubo que botarlos.
Se dijo que el propietario de la bodega, un negocio familiar en la calle 184 Este en El Bronx, quiere recuperar la mayor cantidad de artículos.
Marte añadió que desde la muerte de Junior la bodega ha recibido amenazas de algunas personas que creen que el dueño no hizo lo suficiente para ayudar al adolescente.
Los policías del cuartel 48 enviados al negocio no tuvieron problemas y nadie en el sector confrontó a Marte ni a los trabajadores que hacían la limpieza.