Un grupo de organizaciones feministas protestaron este martes nueva vez frente al Congreso Nacional para exigir la despenalización del aborto en las tres causales.
Las mujeres manifestaron que la restricción legal para la interrupción del embarazo empuja a las mujeres pobres a la práctica clandestina y la someten a graves consecuencias sanitarias y económicas.
Linabel González, de la Oficina Provincial para el Desarrollo de la Mujer de la Provincia Hermanas Mirabal, expresó que está demostrado que las prohibiciones y trabas no disuaden a las mujeres a interrumpir un embarazo producto de una situación extrema.
“Si la penalización persiste seguirá operando un mercado negro de abortivos y redes de clínicas clandestinas que llevarán el luto a las familias dominicanas”.
Manifestó que la falta de estadísticas oficiales sobre muertes por abortos mal practicados no ha permitido dimensionar el problema en el país donde sólo en ” en 2017 se registraron 1,238 víctimas de violencia sexual y exhibe uno de los peores índices de mortalidad materna de la región que ese mismo año cobró la vida de 188 mujeres embarazadas o recién paridas”.