GINEBRA.- El relator especial de Naciones Unidas sobre los defensores de los derechos humanos, Michel Forst, acusó hoy a México no sólo de obstaculizar el trabajo de este colectivo sino de “criminalizarlo”
“Las actividades de los defensores de los derechos humanos en México han sido criminalizadas a través de un mal uso deliberado de la legislación criminal y de la manipulación de los poderes punitivos de las autoridades, tanto por actores estatales como no estatales, para entorpecer e incluso paralizar los esfuerzos de ejercer su legítimo derecho a promover y proteger los derechos humanos”, afirmó Forst.
El relator especial presentó hoy ante el pleno de Consejo de Derechos Humanos de la ONU su informe sobre México, tras una visita al país el año pasado, en la que se entrevistó con diversas autoridades de todos los estamentos y poderes del Estado, y se reunió con 800 defensores de los derechos humanos.
“El relator especial quedó atónito por la extrema violencia en México, el clima de casi absoluta impunidad y la supuesta corrupción e infiltración de las fuerzas fiscales y de seguridad por elementos criminales”, afirma Forst en el informe que redactó tras su visita al país norteamericano.
El mandato de Forst se refiere específicamente a la actividad de los defensores de los derechos humanos y es por eso que su informe versa sobre su situación, que a su entender es muy precaria, dada la criminalización a la que son sometidos, tal y como denunciaron la mayoría de los que hablaron con él.
De hecho, durante los primeros diez meses de 2017, la Comisión Nacional de Derechos Humanos registró 285 ataques a defensores, mientras que la sociedad civil ha denunciado que 730 violaciones se cometieron contra este colectivo solo de enero a mayo de 2017.