BOSTON. Grupos de inmigrantes de Haití y El Salvador entablaron el jueves una demanda contra el gobierno del presidente Donald Trump, argumentando que su decisión de poner fin al estatus de protección temporal para inmigrantes se basa en el racismo.
La querella presentada ante un tribunal federal en Boston exige impedirle al gobierno eliminar el estatus de protección temporal para miles de inmigrantes haitianos y salvadoreños.
“Si se deroga el TPS, estos inmigrantes podrían perderlo todo, sus viviendas, sus negocios, sus familias, el dinero que han invertido en sus comunidades”. TPS son las siglas en inglés del programa Estatus de Protección Temporal.
El TPS fue aprobado para dar alivio temporal a ciudadanos de países que experimentaban conflictos armados, desastres naturales u otros problemas.
En enero, la secretaria de Seguridad Nacional Kirstjen Nielsen anunció que las protecciones para los salvadoreños terminarían y que tenían hasta el 9 de septiembre de 2019 para salir de Estados Unidos o serían deportados.
El Departamento de Seguridad Nacional aseguró que las condiciones en Haití han mejorado lo suficiente desde el terremoto de 2010 para que el país “pueda ahora recibir sin problemas un nivel usual de ciudadanos que retornan”.
El gobierno de Barack Obama había extendido las protecciones a los salvadoreños en 2016, afirmando que el país sufría todavía las repercusiones de los terremotos del 2001 que mataron a más de 1.000 personas.
Sin embargo, según la demanda, las razones esgrimidas por las autoridades para poner fin a las protecciones “no son más que un tenue pretexto para llevar a cabo una agenda de discriminación racial”.
La querella fue presentada por Lawyers’ Committee for Civil Rights and Economic Justice (Comité Legal a favor de los Derechos Civiles y la Justicia Económica) en nombre de ocho inmigrantes inscritos en el programa, entre ellos un salvadoreño que es propietario de un restaurante en Massachusetts y un inmigrante haitiano de 19 años que asiste a una universidad en Boston.
Se basa en reportes de que Trump cuestionó el hecho de que Estados Unidos está aceptando inmigrantes de Haití, usó una grosería para referirse a países africanos y expresó deseos de que se estimule la inmigración de países como Noruega. También menciona versiones de que Trump manifestó que los haitianos que recibieron visas a Estados Unidos “todos tienen sida” y comentarios de Trump durante la campaña como por ejemplo que los inmigrantes mexicanos “traen la delincuencia” y son “violadores”.