WASHINGTON, Estados Unidos. Estados Unidos publicó este martes una lista de funcionarios y empresarios rusos susceptibles de ser sancionados por su supuesta injerencia en las presidenciales de 2016, a lo cual el presidente Vladimir Putin, bromeando, replicó sentirse “ofendido” por ser excluido del listado.
El Departamento del Tesoro difundió una lista de 210 figuras cercanas a Putin, 114 funcionarios y 96 empresarios, incluidos el primer ministro, Dimitri Medvedev, y el titular de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov.
“Es, por supuesto, un acto inamistoso. Complica (…) las relaciones ruso-estadounidenses y perjudica al conjunto de las relaciones internacionales”, lanzó Putin durante una conferencia de prensa con dirigentes de su mando de campaña para las elecciones presidenciales de marzo.
La lista de siete páginas, que no desencadena sanciones inmediatas, también incluyó a jerarcas de los servicios de inteligencia y a dirigentes de empresas públicas como la gigante petrolera Rosneft y el banco Sberbank.
Putin no se mostró sorprendido por el anuncio de Washington. “Estábamos listos para tomar medidas de represalia, bastante serias, que hubiesen reducido nuestras relaciones a cero. Sin embargo por ahora nos vamos abstener de tomar estas medidas”, afirmó.
El presidente dijo que quiso evitar “agravar la situación” bilateral con una réplica y consideró que sería “estúpido reducir nuestras relaciones a la nada”.
“No es la primera vez que sufrimos manifestaciones de agresividad, por ello no hay que ceder a las emociones, primero debemos comprender y luego expresar nuestra posición”, había dicho antes el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, durante un encuentro con la prensa.