SAO PAULO. El Gobierno de Brasil afirmó ayer que continuará apoyando la estabilidad de Haití, después de que el batallón brasileño al servicio de la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas de Haití (Minustah) pusiera ayer fin a sus operaciones en el territorio caribeño.
“Brasil continuará apoyando la estabilidad y el desarrollo en Haití, a través del diálogo político bilateral y de la amplia agenda de cooperación técnica”, resaltó la Cancillería de Brasil en un comunicado.
El país suramericano desmovilizó hoy a las tropas y realizará la desactivación completa de su misión hasta el próximo 15 de octubre.
De acuerdo con el Ministerio de Relaciones Exteriores, Brasil contribuyó “significativamente” para la estabilización de Haití y para la “creación de las condiciones políticas y de seguridad que permitieron la reconfiguración de la presencia de las Naciones Unidas en el terreno”.
El Gobierno brasileño instó a la comunidad internacional a mantener su apoyo en Haití para “consolidar los avances obtenidos desde 2004” y a fortalecer “el liderazgo del pueblo y de Gobierno haitiano en la promoción de la seguridad y el desarrollo del país a largo plazo”.
La Minustah fue creada en 2004 con el objetivo de apoyar a Haití después de que un movimiento armado derrocara al entonces presidente Jean-Bertrand Aristide, y reforzada luego para ayudar a esa nación a recuperarse tras el terremoto de 2010.
Pese a ser considerada como la misión de paz más exitosa, con más duración y movilización de tropas en que ha participado Brasil, la Minustah también ha sido objeto de críticas por su elevado costo para el país y por el número de bajas.
La decisión de poner fin a la Minustah la tomó el Consejo de Seguridad de la ONU en abril pasado, cuando también determinó que permanezca en esa nación antillana un pequeño contingente policial.