Manila,Filipinas .- Pese a que el ataque fue reivindicado por ISIS, las autoridades descartaron la hipótesis terrorismo. El autor del ataque, probablemente un extranjero, quería robar un botín de 2,6 millones de dólares en fichas del casino del Resort World Manila
1 de junio de 2017
Un hombre armado asaltó un casino de la capital de Filipinas e incendió mesas de juego en el abarrotado espacio, creando una asfixiante nube de humo que mató a al menos 36 personas, dijeron autoridades el viernes. El atacante llenó una mochila con fichas de casino antes de huir, pero fue hallado muerto más tarde tras un aparente suicidio en un hotel adyacente.
Los bomberos hallaron los cuerpos de los fallecidos en salas llenas de humo, explicó el jefe de la policía metropolitana de Manila, Oscar Albayalde, que agregó que todos perecieron por asfixia e inhalación de humos. Ninguno de los cuerpos presentaba heridas de bala.
El autor probablemente era un extranjero, dijo Albayalde. “Parece caucásico, habla inglés, es alto y blanco, por lo que probablemente es extranjero”, manifestó.
El ataque hizo que cientos de personas salieran huyendo del complejo Resorts World Manila en la noche y derivó en una reivindicación de terroristas que según la policía carece de evidencia que la respalde. El incidente se produjo mientras fuerzas del gobierno siguen combatiendo a extremistas musulmanes alineados con el grupo Estado Islámico, que tomaron la ciudad sureña de Marawi la semana pasada.
“Le habría disparado a toda la gente que estaba apostando ahí” de haber sido un acto terrorista, dijo el jefe de la policía nacional, el general Ronald dela Rosa. “Pero no hirió a nadie”.
Las imágenes de las cámaras de vigilancia mostraron que el atacante ignoró a un miembro de seguridad que lo interrogó a la entrada del recinto, señaló Dela Rosa. No atacó al guardia, pero entró directo al área de apuestas, añadió.
Más de 70 personas sufrieron en su mayoría heridas leves al generarse una estampida para escapar. El único herido por una bala fue un guardia del complejo que se disparó accidentalmente cuando el sospechoso ingresó a la sala, señalaron las autoridades.
Pero Dela Rosa precisó que la reclamación del EI es falsa y es mera propaganda del grupo yihadista, al añadir que nadie resultó herido de bala.
“Si fuese un terroristas, sembraría el terror”, zanjó.
Tras el ataque, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ofreció las condolencias del pueblo estadounidense a Filipinas.
Indicó que estaba “monitoreando la situación muy de cerca” y continuaría proporcionando actualizaciones.