SANTO DOMINGO.- El presidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (CODUE), sostuvo que es un “mal intencionado y carente de credibilidad”, el informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de incluir a la República Dominicana en la lista de países que violan de los derechos humanos, por la discriminación de personas de ascendencia haitiana.
Reverendo Fidel Lorenzo Merán dijo que el Estado dominicano ha sido exageradamente benévolo con los nacionales haitianos, y que hasta el momento los organismos internacionales no reconocen, ni aceptan, la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional que fue el punto de partida para el ordenamiento de lo que por decenas de años era un gran desorden jurídico sobre el tema migratorio.
En una nota enviada al periódico el Nuevo Diario, Lorenzo Meran dijo que hay que reconocer el esfuerzo que ha hecho el Gobierno en el establecimiento de un sistema migratorio que ha servido de ejemplo en América Latina y en el mundo.
Sin embargo, llamó al Gobierno a ser más responsable con la situación y asumir mayores controles en la frontera entre ambos países.
“Esta situación en la que está siendo objeto la Republica Dominicana por parte de la CIDH, es también resultado de las posiciones débiles, evasivas e irresponsables que han tenido los gobiernos dominicanos, en no asumir con responsabilidad y decisión un tema tan fundamental como el que tenemos ante nuestros ojos”, añadió el presidente del CODUE.
En otro aspecto, el reverendo Fidel Lorenzo Meran sostuvo que las autoridades dominicanas deben declarar la inmigración haitiana como un tema de prioridad nacional a fin de que se definan las políticas de repatriaciones, de empleo y de que se penalice a los empresarios que contraten mano de obra ilegal.