El fallo sobre el juicio disciplinario que se sigue en contra de la suspendida jueza Awilda Reyes, fue reservado para una fecha posterior, que no fue especificada.
El ministerio público, en sus conclusiones pidió la destitución de Reyes, mientras que la defensa pidió la restitución de su puesto, así como el pago de los salarios no devengados durante el tiempo que se ha mantenido su medida de coerción de prisión domiciliaria.
Pasadas las ocho de la noche de ayer, y luego de una accidentada audiencia de dimes y diretes, en la que a la jueza se le impidió salir del tribunal por la ausencia de su abogado titular, los magistrados tomaron la referida decisión.