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LA HAYA.- El Parlamento holandés reeligió hoy a su presidenta, la holandesa de origen marroquí Khadiya Arib, en coincidencia con el comienzo de las negociaciones oficiales con los verdes para que se sumen a una posible coalición de Gobierno con partidos de centroderecha.
Khadiya Arib recibió el respaldo de 111 diputados, del total de 150 que tiene el Parlamento, frente a nueve que votaron por Martin Bosma, del partido ultraderechista VVD, el segundo mayor de Holanda.
Tras la histórica derrota del Partido Laborista PvdA, en el que milita Arib y que perdió 29 escaños en las elecciones del pasado 15 de marzo, esta diputada logró mantener la confianza del Parlamento para ser reelegida como presidenta.
El resto de partidos no presentó ningún candidato a presidir la Cámara.
Arib fue nombrada a principios del pasado año sucesora de la expresidenta del Parlamento Anouchka van Miltenburg, que se vio obligada a dimitir a raíz de un escándalo relacionado con el narcotráfico.
Arib obtuvo el apoyo de todos los diputados del liberal VVD, Llamada Democristiana (CDA), Demócratas 66 (D66) y los verdes de GroenLinks, quienes comenzaron hoy a negociar una posible coalición de Gobierno.
“No habrá nuevo Gobierno holandés al menos en las próximas dos semanas, pero podríamos saber algo antes del parón parlamentario del verano”, dijo hoy la liberal Edith Schippers, encargada de las negociaciones entre los partidos.
Las cuatro formaciones, especialmente los verdes, ya han advertido de que existen grandes diferencias y que las negociaciones podrían ser duras.
El cambio climático, la inmigración, la integración, las políticas fiscales, el sistema sanitario o la edad de la jubilación son algunos de los temas más controvertidos entre los partidos, especialmente entre la izquierda y los liberales.
Schippers dará ruedas de prensa semanales, a partir del jueves de la próxima semana, para ofrecer las últimas informaciones sobre el estado de las conversaciones, pero explicó que no entrará en grandes detalles para “no distorsionar” la negociación.
La importancia de lograr un acuerdo antes de verano es la elaboración, por parte del nuevo Gobierno, de los presupuestos para 2018 con el fin de que puedan ser presentados y sometidos a votación en septiembre.
El proceso más largo de formación de un Gobierno de coalición que se recuerda en Holanda duró 208 días, en el año 1977.
