BRASILIA.- La policía inició hoy una operación para investigar una trama corrupta que se benefició de la construcción de la polémica hidroeléctrica brasileña de Belo Monte, la segunda más grande del país, informaron fuentes oficiales.
Las autoridades indagan el pago de sobornos a dos partidos políticos por parte de empresas integrantes del consorcio constructor de la hidroeléctrica, erguida sobre la selva amazónica, según un comunicado de la Policía Federal (PF).
El juez de la Suprema Corte, Edson Fachin, expidió seis mandatos de allanamiento en tres ciudades brasileñas, a partir de las pruebas obtenidas en el marco del caso Petrobras, que indaga la corrupción en la petrolera estatal.
Según medios locales, en el centro de las investigaciones se encuentran el exsenador Luiz Otávio y Márcio Lobao, hijo del senador Edison Lobao, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), liderado por el presidente Michel Temer.
De acuerdo con la policía, las empresas constructoras pagaban una coima del 1 por ciento a dos partidos políticos, los cuales no son citados en el comunicado debido a que el caso se encuentra bajo secreto judicial.
No obstante, según la prensa local, las formaciones implicadas serían el PMDB y el Partido de los Trabajadores (PT), al que pertenecen los expresidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff.
Los investigados, añade la nota, podrán responder por los delitos de corrupción, lavado de dinero y organización criminal.
La operación de este jueves, bautizada “Leviatã”, es una extensión del caso Petrobras, que ha demostrado que políticos y empresarios amañaban contratos con la petrolera y otras empresas públicas, inflaban sus valores y se repartían las ganancias.
Medio centenar de políticos de prácticamente todo el arco partidario están siendo investigados por su implicación en la trama corrupta que permitió el desvío de miles de millones de reales en los últimos años.