ESTAMBUL. Un total de 568 miembros o simpatizantes del partido prokurdo HDP, la tercera fuerza del Parlamento turco, han sido detenidos desde el lunes acusados de vínculos con la guerrilla del PKK, tras el atentado en el que murieron 44 personas el pasado sábado, informó ayer en Ministerio del Interior.
“En las operaciones realizadas el 12 y el 13 de diciembre en 28 provincias se ha detenido a un total de 568 personas”, señala el Ministerio, una cifra que duplica la difundida esta mañana, de 235 detenidos.
El comunicado señala que las operaciones “se dirigen contra el PKK/KCK”, siglas del proscrito Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK) y de la Unión de Comunidades de Kurdistán (KCK), un difuso concepto de movimientos civiles supuestamente en la órbita de la guerrilla kurda.
“Estamos en contra de cualquiera que apoye el terrorismo. Estamos luchando contra ellos. Estamos decididos a limpiar la tierra de la patria de esos bandidos. Haremos daño a quienes dañen esta nación”, afirmó hoy el ministro del Interior, Süleyman Soylu, al referirse a los detenidos.
Entre los acusados se hallan numerosos cargos del Partido Democrático de los Pueblos (HDP), según Interior.
Este partido confirmó ayer que más de 230 de sus miembros o dirigentes fueron detenidos en la redada.
La operación continúa tres días después del doble ataque que el sábado mató al menos a 44 personas ante el estadio del Besiktas en Estambul y que ha sido reivindicado por el grupúsculo radical kurdo Halcones de la Libertad de Kurdistán (TAK).
El HDP condenó tajantemente el atentado en un comunicado en que manifestó: “Sentimos una gran tristeza y compartimos el dolor de quienes lo han sufrido”.
La policía ha efectuado registros en las oficinas del partido y en los domicilios de los acusados, donde también se incautaron ordenadores y documentación.
Las provincias con mayor número de detenidos son la de Sanliurfa, con 194 detenidos, y Mersin, con 93, ambas situadas en el sureste de Anatolia, pero fuera del ámbito de actuación habitual del PKK.
En la provincia de Adana, también en el sur del país, donde se detuvo a 29 personas, participaron 500 policías con blindados, vehículos antidisturbios y helicópteros, según el diario Evrensel.