El presidente de Top Rank, Bob Arum, sigue sin aceptar el retiro del filipino Manny Pacquiao, pese a que el boxeador filipino fue nombrado hace unos meses senador de Filipinas y colgó definitivamente los guantes, Arum se niega aceptarlo.
Arum, tras la retirada de Pacquiao perdió a la gallina de los huevos de oro, el boxeador filipino fue la gran máquina de hacer dinero en los últimos años para Top Rank y pese a que ya no es el que fue, Arum considera que todavía puede ser un púgil rentable y quiere utilizarlo para catapultar a otros púgiles que maneja.
El promotor ya ha reservado el 15 de octubre y confirmó que viajará en unos días a Filipinas para convencer a Pacquiao.