La directora general de la UNESCO, Irina Bokova, repudió el asesinato del fotorreportero sirio Khalid Al Issa, cometido el 24 de junio en Turquía.
Al Issa fue herido de gravedad el 16 de junio cuando fue detonada una bomba en el edificio donde vivía en Antakya. Una semana más tarde, murió en un hospital de esa ciudad como consecuencia de las lesiones.
“El trabajo y compromiso de los profesionales de los medios de comunicación como proveedores de información es esencial en todas las sociedades, especialmente en las que afrontan un conflicto”, apuntó la titular de la UNESCO.
Bokova aseveró que sin información no se puede progresar y recordó a todas las partes la obligación que tienen de respetar el estatus civil de los periodistas y el derecho que éstos tienen de ejercer sus profesión libremente, según establecen las Convenciones de Ginebra.