Panamá .- Con una exhibición de fuegos artificiales y ante miles de panameños fervorosos que ondeaban banderas, Panamá inauguró el domingo su canal ampliado con el paso de un portacontenedor chino, la más ambiciosa empresa del país centroamericano para impulsar su economía en momentos difíciles en el comercio marítimo mundial. “Esta es una hazaña de la que todos los panameños debemos sentirnos muy orgullosos; el día de hoy marca un momento histórico para Panamá, para nuestro hemisferio y el mundo”, afirmó el presidente Juan Carlos Varela en un acto ante varios jefes de Estado en las nuevas esclusas de Cocolí y con el buque chino cargado con 9.000 contenedores amarrado en las compuertas en una tarde nublada.
“A pesar de las dudas iniciales del proyecto, la obra se ha completado con los más altos estándares de seguridad y calidad”, señaló el líder panameño, quien reconoció que en su momento no respaldó la decisión política de impulsar la expansión en el 2006. Tras el discurso se hizo el conteo regresivo para que se abriera la compuerta media de las esclusas y el lanzamiento de los fuegos de pirotecnia que marcaron la inauguración oficial.
El portacontenedores “Cosco Shipping Panama” se adentró por la tarde a Cocolí, en la entrada del Pacífico, varias horas después de haber ingresado por las nuevas esclusas de Agua Clara en el Atlántico y recorrer la zanja de 80 kilómetros ayudado por varios remolcadores, sin incidentes. Al igual que Agua Clara, miles de personas con banderitas esperaron a los lados de las nuevas esclusas en medio de música salsa y de videos alusivos a la ampliación que se difundían en pantallas a lo largo de las estructuras.
“Me parece excelente la inauguración de las esclusas para las generaciones actuales y las que vienen. Oportunidades para nosotros”, dijo Moisés González, un mecánico de 40 años que trabajó seis años en la construcción de las nuevas esclusas. “Hay que buscar la forma de que le llegue a la población”. Panamá puso en marcha finalmente la apertura de una megaobra de 5.250 millones de dólares con la que persigue duplicar la capacidad del centenario canal, servir a una economía de escala y competir con otras rutas, como la de Suez, en Egipto.
el moderno barco chino, de 48,2 metros de ancho (158 pies) y 300 metros de eslora (984 pies), que ahora es capaz de cruzar el canal, fue asegurado por obreros del canal en la cámara baja o primera de Agua Clara, dando paso a un acto protocolar de las autoridades, en que se recordó a los ocho trabajadores que murieron en la construcción.
Grupo Unidos por el Canal, el consorcio encabezado por la empresa italiana Salini Impregilo y la española Sacyr, entregó la obra terminada el viernes, aunque siguen pendientes una serie de demandas por casos de presuntos sobrecostos estimados en más de 3.000 millones de dólares.
Fuente: Diario Libre