La sequía asociada al fenómeno de El Niño y los conflictos civiles han incrementado el número de países que necesitan actualmente ayuda alimentaria, indicó hoy la FAO.
En Haití, la producción de cereales y raíces cayó en 2015 a su nivel más bajo en 12 años y unos 3,6 millones de personas –más de un tercio de la población– padecen inseguridad alimentaria. De ellas, casi la mitad sufren hambre “severa”, mientras que al menos otras 200.000 personas viven una emergencia extrema de alimentos.
En África austral, el impacto de El Niño ha afectado negativamente a la seguridad alimentaria, y se prevé que la actual cosecha de cereales de 2016 caiga en un 26% con respecto al ya reducido nivel del año anterior.
A la prolongada sequía en Papúa Nueva Guinea el año pasado han seguido lluvias torrenciales e inundaciones localizadas a principios de 2016, afectando a cerca de 2,7 millones de personas. Se espera un importante déficit en la producción de cereales en la región de las tierras altas del país, mientras que se prevé que se reduzca por segundo año consecutivo la cosecha en la vecina Timor Leste.