Washington, D.C. – La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresa su preocupación por la situación de tres periodistas reportados como desaparecidos en la localidad de Filogringo, Colombia, ubicada 700 kilómetros al norte de Bogotá y a tan solo 50 kilómetros de la frontera con Venezuela. La Relatoría Especial hace un llamado a las autoridades colombianas a poner en práctica todos los instrumentos disponibles para actuar de manera pronta y oportuna, encontrarlos y adoptar las medidas de protección correspondientes.
De acuerdo a la información disponible, la primera periodista en desaparecer fue Salud Hernández-Mora, columnista del periódico El Tiempo de Bogotá y corresponsal de El Mundo de Madrid, tras haber ido a la zona como parte de un reportaje que estaba realizando. Filogringo es una localidad históricamente conflictiva, con presencia de guerrilleros y paramilitares, de topografía montañosa, difícil acceso y escasa comunicación en el departamento Norte de Santander. Hernández-Mora fue reportada como desaparecida el sábado 21 de mayo, informaron medios de prensa.
Ante esta situación, reporteros de los canales de televisión RCN y Caracol TV y la agencia de noticias EFE se trasladaron al lugar el lunes 23 para cubrir el hecho y fueron retenidos, presuntamente por parte de guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN). El periodista Diego Velosa, de Caracol TV, el camarógrafo que lo acompañaba y el reportero de EFE fueron liberados el mismo día, mientras que un periodista y un camarógrafo de RCN –Diego D’Pablos y Carlos Melo– permanecían desaparecidos a la fecha. “Cuando ya nos encontrábamos desarrollando el trabajo fuimos abordados por guerrilleros del ELN, que nos retuvieron por espacio de tres horas y tras tres horas de interrogatorio nos quitaron todos los equipos: cámaras, computadores, todo lo que llevábamos”, declaró Velosa el martes 24. Agregó que les obligaron a irse del lugar y que los equipos no les habían sido devueltos.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ordenó a las autoridades de seguridad reforzar los trabajos para encontrar a los tres periodistas. “Le he dado instrucciones al comandante del Ejército y al director de la Policía que se trasladen al sitio para reforzar todos los operativos para buscar a Salud Hernández y a los dos reporteros que todavía no aparecen”, dijo el mandatario el martes 24.
La Gobernación de Norte de Santander ofreció una recompensa de 100 millones de pesos colombianos (unos 32.680 dólares estadounidenses) a quien aporte información que permita localizar a los tres reporteros.
El Estado de Colombia informó a la Relatoría Especial que la Fuerza Pública de Colombia trabaja desde el domingo 22 de mayo para ubicar a Hernández-Mora y que el presidente Santos estableció como prioridad desplegar todos los esfuerzos necesarios para localizar a los tres periodistas. Agregó que un equipo de la policía especializada en secuestros se trasladó a la zona donde fue vista por última vez y que estaba avanzando en la recopilación de información y evidencias. A su vez, las Fuerzas Militares y la Policía Nacional activaron los protocolos de búsqueda con equipos de inteligencia y refuerzos en el área. La Fiscalía General de la Nación también se encuentra investigando el caso.
La Relatoría Especial reconoce la respuesta del Estado, que adoptó medidas urgentes para establecer el paradero de los periodistas. En tanto, en medios de comunicación de ese país se han publicado distintas versiones sobre los tres periodistas y la situación en la que se encontrarían, no descartándose que estén retenidos por grupos armados.
Los y las periodistas cumplen una función fundamental en situaciones de conflicto armado pues son quienes, arriesgando sus vidas, llevan al público una visión independiente y profesional de lo que realmente ocurre en áreas de conflicto. En consecuencia, el Estado debe brindarles la mayor protección posible para que puedan seguir ejerciendo su derecho a la libertad de expresión, de manera tal que se satisfaga el derecho de la sociedad a estar adecuadamente informada.
De acuerdo con la declaración conjunta sobra la libertad de expresión y las respuestas a las situaciones de conflicto, emitida en 2015 por los relatores para la libertad de expresión de Naciones Unidas, Europa, África y América, “los Estados también tienen la obligación de brindar protección a los periodistas y otras personas que ejercen su derecho a la libertad de expresión que tengan un riesgo elevado de ser atacados” en situaciones de conflicto.
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión es una oficina creada por la CIDH con el fin de estimular la defensa hemisférica del derecho a la libertad de pensamiento y expresión, considerando su papel fundamental en la consolidación y el desarrollo del sistema democrático.
Fuente: OEA Prensa